jueves, 12 de marzo de 2015

"A veces, la persona a la que nadie imagina capaz de nada, hace cosas que nadie imagina."

Hace un par de días me desperté tan mal, que no sabía qué hacer. Así que avisé a una amiga, me acogió en su casa y decidimos poner una película. Acabamos viendo "The Imitation Game". Y he de decir que me gustó mucho, porque no era para nada lo que esperaba. Y cuando pasa eso, la peli me gusta. En la película salen Benedict Cumberbatch y Keira Knightley. He escrito los apellidos de memoria así que si lo he hecho mal, no me juzguéis. La verdad es que hacen un buen papel. Mi querido Cumberbatch me tiene enamorada. Pero lo más interesante es que cuando acabé la película supe que está basada en una historia real. Que Alan Turing existió. Que lo que le pasó es cierto. Que su dolor fue real. Y lloré más al acabar la película que durante toda ella.
Y me quedé pensando en el daño que hacemos las personas. La película es de la época de la II Guerra Mundial, pero creo que la cosa no ha cambiado tanto como debería. Se sigue pensando que una mujer no puede ser inteligente, o fuerte. Que un hombre no puede llorar si le hieren. Que si dos personas del mismo sexo se quieren es algo asqueroso. Que importa más el qué dirán más que nuestros sentimientos. Y esto me cabrea. Mucho. Porque yo siempre he pensado que cada cual puede hacer lo que quiera. Siempre que no haga daño a nadie, ¿qué más me da? Yo puedo estar o no de acuerdo pero no soy nadie para decirle a nadie cómo vivir su vida, puesto que aún estoy aprendiendo a vivir la mía. Pero, al parecer, poca gente está de acuerdo conmigo.
Poca gente se para a pensar que el chico del que se rieron, se odia a sí mismo cada día más.
Que la chica a la que intentaron ahogar cuando tenía cinco años se quiso llegar a matar, ya que ellos no lo consiguieron. La chica a la que insultaban y perseguían para darle palizas, llegaba a casa sonriendo para que sus padres no se preocuparan otra vez.
La gente que sufre cosas así, al principio cree que es su culpa. Piensan "¿Por qué no puedo ser cómo los demás?". Y hacen falta muchas lágrimas, y a veces muchos años para darte cuenta de que el problema no eres tú. Son ellos. Y por desgracia, siempre son más. Pero, ¿sabéis qué? Hace mucho que dejó de importarme lo que me dicen, cómo me miran o cómo me hablan. Dicen que hace daño el que puede, no el que quiere. Y ya no pueden. Y ahora lloro, y me siento sola de vez en cuando, y dudo muchas cosas. Y ellos siguen queriendo que sea normal. La diferencia es que yo ya no quiero.
Y quizás esto tenga poco (o nada) que ver con la película, pero una vez he empezado a escribir... Ya no he parado. No sé si habré escrito algo medianamente decente, pero esto se queda así que si me pongo a releer y corregir cosas acabo por no publicar nada.

Photobucket






5 comentarios:

  1. Felicidades por escribir de un tiron lo que muchos pensamos, lo has clavado y solo una cosa mas queria añadir, hay un momento que estan enterrando a Touring bajo unas tablas y el descubre que si no grita, acaba con el placer de sus verdugos, esa debe ser la actitud. No darles gusto a los que nos quieren herir. Un abrazo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Gracias! Y llevas razón, esa debería ser la actitud siempre. Aunque lo ideal sería que no hiciera falta ser así. Pero si ellos no preveen cambiar, no queda otra que ser fuerte.
      Besos

      Eliminar
  2. Hey...excelente post! suelo pasar por lo mismo que Alan...de hecho necesito darle al resto lo que quiere de mí para que no comiencen a pensar que necesito ir al psicólogo...es difícil encontrar a personas como yo...aunque creo que el gusto por la película es un buen punto de referencia.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Nunca hay que ser de una forma u otra sólo por que la gente lo crea. Ser uno mismo es difícil, ¡pero vale la pena!
      También decirte que ir a un psicólogo no es en absoluto raro, malo o para locos. Yo misma tengo un amiga psicóloga y es absolutamente genial hablar con ella de temas que a lo mejor no entendería cualquier persona. Es de mucha ayuda.
      ¡Gracias por comentar!

      Eliminar
  3. Gracias, los que nunca pudimos ser normales, nos identificamos contigo (en cualquier tiempo)

    ResponderEliminar